jueves, 18 de abril de 2013

.La lluvia perfumada ya cayó.

Esa gente que camina a paso lento (fríos). Llevan como instrumento cartulinas impresas a color, banderas de telas de seda y el celular en el bolsillo. Cuando dejan de caminar, saltan sonrientes agitando cantos y yo realmente no puedo distinguir si son los seguidores de la selección en los mundiales festejando un 1 a 0 contra República Checa o si José Luis Perales vino a la Argentina para dar su último concierto, de manera gratuita sobre una avenida.
Pero cuando caminan, me hacen acordar a esos humanos con la nuca  pinchada que en El Eternauta iban hacia un mismo lugar, similar.