A cada segundo hay un futuro volviéndose presente que al segundo se transforma en pasado, entonces ¿no son los tres parte de una misma cosa? Si el pasado no existe más que en nuestra mente y el futuro nunca llega como tal, y tenemos un presente que se diluye a cada paso del tic tac ¿qué nos queda?
Poner el corazón en cada instante para que los tres estados del tiempo se envuelvan en una única eternidad.

Las rejas en las prisiones,
las rejas delante de las casas.
Todo lo que nos encarcela.

Los cordones anudados,
la correa rodeando el cuello del perro.
Todo lo que nos ata.

Los corpiños apretados,
los cinturones ajustados.
Todo lo que nos sujeta.

Los celulares como extensión de la mano,
las publicidades por todos lados.
Todo lo que nos encajan.

La bici atada,
la locura encerrada,
la cordura suelta,
Todo nos encadena.