sábado, 27 de octubre de 2018



Acumulada de calor abrirás un día y sobre una suave piel vivirás el sol. 
Deberás aprender a ser entre las espinas.
Caminarás por ellas hasta que la filosa punta de alguna se clave en lo que te palpita. 
Dejarás correr la gota rojiza y cambiarás la piel dejando que tu desnudez se bañe de tu propia herida. 
Descenderás derramando el salado cristal que nace desde donde se mira y empañarás la claridad de tu propia vista. 
La noche se cerrará. A veces la luna será tu guía.
Descubrirás un nuevo amanecer cuando se seque todo lo que limpia y consumarás amor transitando tu propio renacer. 
Será renovador, pero el calor por contener brotará con una porción de astilla.