domingo, 15 de julio de 2007

.Sin palabraS.

Bebiendo de tu boca empezó a alborotarse un corazón (no supe si era el tuyo o era el mío).
Y los árboles aplaudían nuestro amor. Junto al viento nos ovacionaban mientras el sol les teñía de dorado las hojas con su caricia. Y, bailando, nos señalaban hacia un lugar. Nos enseñaban el camino del viento. De ese viento que te hace temblar en sueños.
Humo desde todos los verdes y burbujas en el cielo.
¡Hasta el pasto se puso fluorescente de felicidad!
Todo nuestro entorno estaba de fiesta (y no era para menos).
.(capaz eran los dos que, al sentirse cerca, golpeaban en el pecho gritando que estaban ahí adentro, atrapados, y que querían salirse pero no sabían cómo).
Caminando con los pómulos abultados y chispitas en los ojos, la primavera me iba llenando, con pétalos de colores, el alma.
Viéndome reflejada en tus ojos marihuana, sol y cielo y sintiéndome acariciada por un abanico de arcoiris en cada pestañeo. Y entre un mar de estrellas nuestras pupilas que, suspendidas en el cielo, hablaban de amor mientras una mano con veinte dedos se envolvía, se besaba, se fundía.
Y los corazones se escaparon por nuestros ojos, entregándose ciegamente al calor de dos soles encendidos que pudieron, nuevamente, hacer el amor con la mirada.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

los amo a los dos.
Como dos.. como uno.
(L)

Anónimo dijo...

y encontre las palabras justas a lo q senti... gracia meli, te quiero.